08 enero 2013

Visitante



Volvemos a la carga con otro disfraz! El motivo fue una fiesta de cumpleaños, a la que fuimos disfrazados de “visitantes” de incógnito… os acordáis de V?  

 Esta vez tuvimos que organizarlo de otra forma, porque no había mucho tiempo antes de la fiesta para los acabados. La solución fue preparar el día anterior el látex, dando las texturas y colores el día de antes y dejándolo todo preparado para llegar a casa, ponernos el látex ya trabajado y salir corriendo!



 



Materiales:

1 bote pequeño de látex

Rotuladores verdes y negros

Polvos de maquillaje / sombra de ojos verde

Fundas de plástico (galgas)

Papel de cocina
Jeringuilla



 Sobre las fundas de plástico, dibujamos la forma del trozo de piel de lagarto que nos queramos poner.



Debemos darle (yo lo  hice con papel de cocina, también se puede con una brocha de carpintería) un par de capas a toda la zona para obtener una buena base sobre la que trabajar.



Con cuidado, cargamos la jeringuilla con el látex. Es bastante fácil, sólo hay que tener cuidado con las burbujitas de aire que, en el momento de hacer el dibujo de la textura, pueden dificultar la salida regular del látex.



Una vez cargada, empezamos a hacer los dibujos de escamas. No nos olvidemos de hacer dos franjas de unos 20 cms de largo que utilizaremos para hacer la piel levantada.

 

Ya tenemos las bases, que es conveniente dejar secar al menos 2 horas. Se puede acelerar el proceso con un secador, no demasiado caliente!



Cuando veamos que está bien seco, podemos empezar a pintar el látex. Podemos hacerlo sobre el plástico en el que está o sobre la piel; en este caso vamos a aplicar la pintura antes de levantarlo. Lo más importante, en cualquiera de los dos casos, es espolvorear generosamente los parches de látex por las dos caras con polvos de talco o polvos mate con una brocha para que el material no se pegue sobre sí mismo.



Con rotuladores gruesos de tonos verdes, un permanente negro para enfatizar las líneas y un disco de algodón para extender la tinta, conseguimos estos resultados.



Cuando la tinta ya esté seca, empezamos a colocarlo sobre la piel. Fijamos la ceja sobre la que va a ir el látex con pegamento de barra o con jabón, damos una capa de látex para pegar el parche.



Una vez pegado, hacemos lo mismo con la tira de piel, dejando uno de los extremos levantado para que dé ese aspecto de piel arrancada.













18 diciembre 2012

Hellraiser

Un poco siniestro como primera entrada, sí, pero un exitazo como disfraz, digno de mención!




SI!! En modo Hellraiser! y de paso nos inventamos una novia en transición para este personaje (depende de vuestra infancia, más o menos conocido). 
Éste fue el resultado de 4 horas de látex, pinturas varias, más látex y pseudoclavos: un Halloween espectacular!!! (En esta ocasión no hice fotos del making off, la próxima vez que lo haga, fotografiaré el proceso).



Paso 1: Látex: se encuentra en tiendas de disfraces o de fiesta, y no es muy caro! con dos botes nos dio para darle 3 capas en la cabeza con una brocha para preparar una base sobre la que poner los "clavos". Cada capa puede secarse con secador para acelerar el proceso. Nota: Aunque parezca muy obvio, no aplicar sobre cabello directamente (cejas incluidas)!!!! si no queréis afeitaros la cabeza, usad un gorro de látex o silicona.

Paso 2: Pintar la cabeza de blanco, aquí utilizamos una barra de maquillaje de las tradicionales, pero hay bases blancas que también quedan muy bien. Para no pintar las cejas directamente, cogí una pequeña porción de jabón en pastilla que hice virutas y mezclé con agua hasta hacer una pasta que sirve para proteger las cejas y luego se limpia fácilmente.

Paso 3: Las líneas. Con eyeliner, hay que tener cuidado para hacerlas rectas y siguiendo el patrón de la cara del original; es más fácil si antes se marcan los puntos de intersección y luego se unen con líneas rectas.

Paso 4: Éste es probablemente el que da calidad al disfraz. En este caso, nos sirvió con un sencillo pero eficaz truco: tunear bastoncillos de algodón. Así no se corre peligro de clavarse un clavo o de que se caigan al poco tiempo por el peso. 
Preparación: A un bastoncillo se le cortan los extremos de algodón, se queman los extremos y se apoyan en una superficie lisa y dura (por ejemplo un plato) para que queden las bases alargadas. Una de ellas servirá como apoyo para pegar el "clavo" a la cabeza, la otra para que parezca un clavo real. Hubo que hacer unos 80 bastoncillos, que después se pintaron con pintura de imprimación en spray de color gris metálico. ¡Quedaron perfectos!
En el momento de pegarlos, sólo hizo falta poner un poquito de látex en uno de los extremos y colocarlo firmemente durante unos segundos en los puntos de intersección... 





Esta versión fue más fácil de hacer.

Paso 1: Extender en una línea diagonal a través de la cara con un pincel una franja de látex de unos 3 cms de grosor. Repetir un par de veces, pero sin excederse en la cantidad de látex o quedará demasiado grueso.
Cuando esté seco, levantar con cuidado hasta la mitad uno de los lados de la franja, para que parezca piel. 

Paso 2: Maquillaje. La zona blanca está pintada con barra de maquillaje blanca, sin más; la parte que está despellejada es una mezcla de base de maquillaje con pintura roja (especial disfraces), sangre artificial y, una vez aplicado sobre la cara, marcado con sombra de ojos azul y marrón.


Merece la pena disfrazarse así sólo por ver cómo te mira la gente al principio (creando traumas infantiles por el barrio)... y porque sé de uno que fue la estrella de esa noche ;) (Gracias, neni)